Objetivo:
Investigar si la posición del ápice lumbar tuvo un impacto en el desarrollo de enfermedad del segmento adyacente (CIA) después de la fusión intercorporal lumbar transforaminal (TLIF).
Resumen de los datos de referencia.
Estudios previos han demostrado que concentrarse únicamente en el valor de la lordosis lumbar no es adecuado y que descuidar la importancia del ápice lumbar puede conducir a complicaciones mecánicas. Sin embargo, la relación entre el ápice lumbar y la CIA aún no se comprende bien.
Current Issue: Lumbar Apex Position as an Independent Risk Factor for Adjacent Segment Diseases in Patients Undergoing Short-Level Transforaminal Lumbar Interbody Fusion https://t.co/nAKguCYSil pic.twitter.com/2qXaYRSlCq
— Spine (@SpinePhilaPA76) September 28, 2024
En los últimos años, la fusión intercorporal lumbar transforaminal (TLIF) se ha convertido gradualmente en un enfoque quirúrgico común para el tratamiento de enfermedades degenerativas lumbares refractarias. Aunque la TLIF es un abordaje quirúrgico altamente efectivo, también puede conducir a algunas complicaciones posoperatorias. La enfermedad del segmento adyacente (ASD) es un problema común después de la cirugía TLIF y con frecuencia conduce a un resultado clínico comprometido.1 Por lo tanto, es de gran importancia práctica para los cirujanos predecir el riesgo de desarrollo de ASD en los pacientes que se sometieron a TLIF. Investigaciones recientes subrayan la influencia significativa de la mala alineación sagital en la incidencia de ASD. El desajuste de la incidencia pélvica-lordosis lumbar (PI-LL) se ha reconocido como un factor de riesgo significativo de ASD, pero esta fórmula no está exenta de limitaciones.2–5
LL representa la medida del ángulo formado por las placas terminales L1-S1, y los individuos con medidas idénticas de LL pueden exhibir configuraciones lumbares sagitales variables.6 Por lo tanto, Roussouly et al. 7 identificaron cuatro perfiles espinales distintos en la población sana, categorizados de acuerdo con las variaciones en la forma de la lordosis. Nuestras investigaciones anteriores confirmaron que la clasificación de Roussouly podría utilizarse para predecir la CIA.4 Sin embargo, cuando se utiliza la clasificación de Roussouly para evaluar si la forma actual coincide con el tipo teórico, es necesario evaluar numerosos parámetros. Este proceso de evaluación es tedioso y complejo, lo que reduce significativamente la fiabilidad y reproducibilidad de los resultados, haciéndolo poco práctico para la aplicación clínica directa. En consecuencia, la clasificación de Roussouly debería simplificarse cuando se trata de evaluar a pacientes con enfermedades degenerativas lumbares.
El ápice lumbar es un componente crítico introducido originalmente en la clasificación de Roussouly y puede afectar significativamente la forma de la columna lumbar.8–10 Estudios recientes han demostrado una relación significativa entre la PI y el ápice lumbar, lo que indica que la morfología pélvica puede influir en la forma lumbar.6,8 Estudios posteriores han revelado que centrarse exclusivamente en el valor de LL sin considerar la importancia de la posición del ápice lumbar es inadecuado para el tratamiento quirúrgico de las deformidades espinales en adultos.6,11,12 Sin embargo, la relación entre la posición del ápice lumbar y la CIA sigue sin estar clara. Por lo tanto, este estudio tuvo como objetivo evaluar cómo la posición del ápice lumbar afectaba el desarrollo de la CIA después de la cirugía TLIF de nivel corto e investigar la relación entre la alineación espinopélvica y el ápice lumbar.
Wang M, Wang X, Wu J, Shen Y, Qiu Y, Sun X, Zhou D, Jiang Y. Lumbar Apex Position as an Independent Risk Factor for Adjacent Segment Diseases in Patients Undergoing Short-Level Transforaminal Lumbar Interbody Fusion. Spine (Phila Pa 1976). 2024 Oct 15;49(20):1435-1444. doi: 10.1097/BRS.0000000000005043. Epub 2024 May 15. PMID: 38747237; PMCID: PMC11419276.